Hay un pollito
que tiene frío,
me está diciendo
su pío… pío…
Voy en su ayuda
apresurado
y el muy sinvergüenza
ya se ha tapado.
Bajo el plumaje
de su mamita
mueve contento
su cabecita.
Vuelvo sonriendo
al cuarto mío,
y otra vez siento
su pío… pío…
sábado, 4 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario